¿Alguna vez imaginó que terminaría comprando un flamenco inflable para su piscina? ¿O que no podrías vivir sin la máscara negra para limpiar los poros? Probablemente la respuesta sea no, ya que ni siquiera conocías esos productos.
Sin embargo, algo está cambiando en el comercio electrónico: ya no solo compramos marcas que conocemos, sino que también fomentamos marcas o productos de los que nunca hemos oído hablar. ¿Qué o quién está detrás de este cambio?